El retorno de la democracia guatemalteca, que merece ser recordada

MSc. Mario Mérida

La interrogante que sigue es ¿A quién le interesa recordar este momento?… por lo que se conoce hasta hoy a ninguno, ni siquiera a quienes debería importar, comenzando con el flamante Tribunal Supremo Electoral y la mayoría de políticos de oportunidad que, a lo largo de los últimos cuarenta años, han tratado de aprovecharse del sistema. Solo para recordar, que ayer lunes (8) del mes en curso se cumplieron 40 años del triunfo en las urnas del licenciado Vinicio Cerezo y, con este el retorno a la democracia tal como la conocemos y practicamos.

En la segunda vuelta electoral compitieron por la presidencia Cerezo Arévalo de la Democracia Cristiana Guatemalteca y Jorge Carpio del partido Unión del Centro Nacional, esta contienda fue ganada por Cerezo con el 70% de los votos a su favor. A partir de ese momento principiaron a correr rumores acerca de que el ejército no le entregaría la presidencia al Cerezo, pero no fue así. La agenda del gobierno militar estaba definida.

El programa retorno a la institucionalidad inició en el mes de febrero (1985), con el anuncio del General Humberto Mejia Víctores del calendario de las elecciones a realizarse ese año. Jefe de Estado, que incluyó inicialmente la convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente, que terminó de redactar la nueva Constitución Política de la República de Guatemala (mayo 30/31)

Para el mes de noviembre (03) se convocó y realizó la primera vuelta electoral, bajo la responsabilidad del Tribunal Electoral dirigido por el licenciado Arturo Herbruger, en la cual compitieron  Vinicio Cerezo Democracia Cristiana Guatemalteca; Jorge Carpio Nicolle Unión Centro Nacional; Jorge Serrano, Mario Sandoval Alarcón MLN-PID; Mario David Garcia Central Auténtica Nacionalista;  Mario Solórzano    Partido Socialista Democrático; Alejandro Maldonado       Partido Nacional Renovador y Lionel Sisniega Otero PUA-MEC-FUN. Los finalistas en esta primera etapa fueron Cerezo y Carpio y tal como se mencionó, en  la segunda vuelta triunfó Cerezo.

Cerezo, asumió la presidencia (14/enero/1986), fecha en que también entró en vigencia la nueva Constitución y se instaló un nuevo Congreso. El nuevo presidente retomó la agenda de la paz del gobierno, honrando los avances logrados durante el gobierno de Mejia Victores, mediante la neutralidad actividad que se materializó con los Acuerdos de Esquipulas I (1986) y II (1987). Este segundo acuerdo abrió la oportunidad para el primer encuentro exploratorio con la URNG en Madrid, España hasta la firma de la paz (1996).

Transcurridos 40 años, pareciera ser que estamos con las mismas o mayores expectativas, que hasta ahora ninguno de los gobernantes electos ha logrado cumplir. Por ello, es momento de dedicar un tiempo a reflexionar con antelación acerca de las desiciones que se han de tomar ante el próximo proceso electoral.