Guatemala en tiempo de huracanes
Guatemala se localiza en latitud 14.64072 y longitud -90.51327 su posición georreferencial le brinda propiedades climáticas tan especiales, que suele decirse que es el país de la eterna primavera. Este calificativo obedece a las 2 estaciones que generalmente se registran, invierno y verano, otros países a diferencia poseen 4 estaciones siendo estas inverno, verano, otoño y primavera.
Nuestro invierno suele iniciar entre la primera y segunda semana de mayo, situación que en el campo aprovechan los agricultores para iniciar la plantación de cultivos. La Ciudad de Guatemala, suele registrar sus primeras borrascas (temporales) entre el 9 y 14 de mayo, lo anterior, según registros de inundaciones recopiladas por los medios de prensa nacional y los programas de primera respuesta de los cuerpos de emergencia.
Nuestra agencia local Insivumeh realiza pronósticos propios basados en sus estaciones, las cuales son propiedad del Gobierno de Guatemala, en paralelo el sector privado, cuenta con instituciones especializadas en la instalación de estaciones climáticas en diferentes puntos del país (Climaya), identificando las condiciones propias de cada micro clima y realizando proyecciones climáticas en tiempo real similar al realizado por el sector azucarero del país, muchas otras empresas y personas adquieren sus propias estaciones climáticas para realizar controles, los dispositivos móviles y aplicaciones en red disponibles.
Finalmente, la agencia más importante de nuestra región es el Centro Nacional de Huracanes (NHC), propiedad del Gobierno de Estados Unidos de Norteamérica, la cual establece en nuestro continente los calendarios climáticos de tormentas y huracanes, a su vez es el generador de modelos precisos de eventos climáticos desde su formación, desarrollo, dimensión y trayectorias.
En climatología, Centroamérica se encuentra considerada dentro del calendario climático para la temporada de huracanes del Centro Nacional de Huracanes (NHC), este calendario establece que la temporada de huracanes se divide en dos, siendo la temporada del Pacífico, la cual inicia el 15 mayo y la temporada del Atlántico la cual inicia el 1 de junio. Ambas temporadas concluyen el 1 de noviembre.
La variabilidad climática suele verse influenciada por el consumo desmedido en las Cuentas de Capital Natural de los países, generando efectos en la periodicidad y la intensidad de lluvias.
La variabilidad climática ha sido investigada por el hombre desde el siglo XVII, hasta sus evidencias y conclusiones finales identificadas en el año de 1,920, cuando el científico ingles Gilbert Walker, evidenció la variabilidad climática similar a la registrada en este año 2024, en donde Europa registró los primeros días de enero temperaturas por debajo -43,6° C, las cuales provocaron acumulaciones de hielo históricas, a partir de marzo inició el proceso de deshielo el cual ha ocasionado lluvias e inundaciones atípicas a las registradas en años anteriores. Al investigar las condiciones de este año en nuestra región solo las puedo comparar con las documentadas por el Banco Mundial en su publicación del 10 de septiembre del 2014.
Las condiciones climáticas actuales, similares al fenómeno de La Niña en el primer semestre del año 2024, han registrado durante la segunda quincena del mes de junio lluvias, desbordamientos, derrumbes, daños estructurales a viviendas, carreteras y puentes. La pérdida de vidas humanas y los efectos colaterales que impactan en la economía y la calidad de vida de los guatemaltecos.
Nuestra situación es una historia que se repite en América, desde La Patagonia hasta Canadá, por ahora no se han registrado en Guatemala deslizamientos en sectores habitacionales o socavamientos que cobren vidas en distintos puntos del país.
Las condiciones climáticas emitidas por el Centro Nacional de Huracanes, por ahora indican que retornamos esta semana a condicientes de invierno promedio, lluvias en la tarde y noche, las mismas pueden registrarse en moderadas e intensas por lo que debemos seguir atentos a posibles daños estructurales o crecidas y desbordamientos como las ya registradas en Escuintla.
Finalmente, en diferentes medios sociales, he podido evidenciar la respuesta del guatemalteco de a pie que arriesga su vida y sus bienes con la finalidad de poner a salvo a otra persona la cual no conoce. Nuestra gratitud a esos hombres y mujeres (Los Héroes Anónimos de mi Guatemala).