Las evidencias de la intervención nutricional de precisión en diabetes «comienzan a ser sólidas», según experto
El coordinador del Grupo de Trabajo de Genética de la Sociedad Española de Diabetes (SED), el doctor Jesús Blanco, ha destacado que, a pesar de que «la intervención nutricional de precisión», en pacientes diabéticos, aún no se aplica «de manera generalizada» en las consultas, «las evidencias comienzan a ser sólidas», en el marco del XXXV Congreso Nacional de la Sociedad Española de Diabetes (SED), celebrado en Granada.
Por dpa/EP
Coincidiendo con la presentación de este encuentro, el doctor Blanco ha detallado que, aunque el abordaje basado en la reducción del peso o tejido adiposo se asume como la herramienta más práctica para hacer frente a la diabetes, cada vez están más cerca de aplicar «abordajes más individualizados, en los que consejos dietéticos, de actividad física y farmacológicos se alinean con aspectos de predisposición genética».
En lo que respecta al conocimiento sobre aspectos genéticos de la diabetes, el gen HNF1A se ha erigido en una prometedora diana terapéutica, «tanto en la aparición de diabetes monogénicas (que se caracterizan por un defecto genético específico que causa la enfermedad) como en DM2», ha indicado el experto, quien lo ha considerado como «un ejemplo clarísimo sobre el solapamiento clínico entre diferentes formas de diabetes».
«Hace 100 años era incurable»
«Hay que pensar que estamos hablando de una enfermedad que hace 100 años era incurable», ha añadido la vicepresidenta 1ª de la SED y facultativa de Endocrinología y Nutrición del Hospital Virgen de la Victoria (Málaga), la doctora María José Picón.
«Llevamos 100 años desde que se descubrió la insulina asumiendo que es una enfermedad que no la podemos prevenir y ahora sí que estamos un poco en esa línea», con la posibilidad «de modular el sistema autoinmune», ha asegurado la experta.
En este sentido, la doctora Picón ha destacado la necesidad de «desarrollar estrategias en el sistema sanitario», para precisar el abordaje de estos nuevos tratamientos, así como la formación en estos ámbitos.
«Parecía que la única solución que teníamos para el paciente con diabetes tipo 1 era aportarle tecnología para que su enfermedad la llevara con más calidad de vida y ahora resulta que vamos a aportar otras cosas, como es la posibilidad de prevención, de retraso y de apaciguar la gran afectación de la vida que produce a la persona que recién debuta con una diabetes», ha manifestado.
Obesidad, «principal aliado»
Por su parte, el presidente del Comité Local XXXV Congreso Nacional de la SED, el doctor Pablo López Ibarra Lozano, ha señalado que «el principal aliado de la diabetes es la obesidad», y sin embargo, «lo que hace es crecer, más que menguar», ya que, según ha añadido, «no se aborda con la suficiente seriedad».
Ante este contexto, el experto en Endocrinología ha manifestado la necesidad de «hacer un gran trabajo de cara a la detección de pacientes que en el futuro puedan convertirse en diabéticos tipo 1».
«Tenemos ahora a nuestra disposición unos marcadores que son capaces de predecir con gran exactitud qué pacientes van a desarrollar en un futuro esta enfermedad. Claro, detectarlos sólo se puede conseguir haciendo campañas de detección a nivel de toda la población», ha detallado.
«Con respecto a la diabetes tipo 2, pues llevamos dos décadas que yo podría calificar de prodigiosas, porque han aparecido una serie de fármacos con una gran capacidad, no sólo para el tratamiento de la diabetes tipo 2 en sí misma, sino con la capacidad de reducir de manera importantísima el riesgo cardiovascular de estos pacientes», ha concluido.