Análisis sísmico global al 17 de agosto del 2025
Por Manolo Morales
Para analistas de la geofísica y vulcanología el año 2025, registra actividades poco comunes en magnitudes y replicas sísmicas de baja profundidad como las registradas a partir del 22 de mayo, en el sismo de 6.1 ° en las islas griegas de Creta y Santorini. Otro evento seguido de cerca por los geólogos es el sismo de 8.8 ° el 30 de julio en la península de Kamchatka, Rusia.
Para Guatemala y El Salvador ha sido un año inusualmente sísmico. Lo antes expuesto obedece al evento sísmico significativo del 8 de julio del 2025, de las 15:11:03 horas, de magnitud 5.2° Richter, con profundidad de 35 kilómetros y con epicentro convergente en el municipio de Santa María de Jesús, Sacatepéquez, Palín Escuintla y Ciudad Capital. Al 17 de julio el Instituto Nacional de Sismología e Hidrología (Insivumeh), registraba más de 1,000 réplicas por debajo de los 3° Richter y con profundidades en rangos inusuales de 700 a 800 metros. Al momento de redactar este artículo el 17 de agosto, se registró un nuevo evento de 3.1 ° en Sacatepéquez.
Otro evento sísmico de magnitud 5.8 °, tuvo lugar el 29 de julio a las 15:21 horas, con profundidad de 5 kilómetros. Guatemala y El Salvador activaron sus protocolos de emergencia atendiendo a que el epicentro se identificó en el departamento de Jutiapa colindante con El Salvador, a partir de ese momento se han documentado por el Insivumeh de Guatemala y el Ministerio de Ambiente del Salvador más de 852 réplicas, incluido el evento del 17 de agosto de las 14:35 horas de magnitud 3.3 ° y de profundidad 2.83 kilómetros. Esta serie de sismos tienen similitud con los eventos sísmicos vinculados a la dinámica de la falla del Motagua, registrados en el año del 2011, 2003 y 1992.
Sabemos que la naturaleza de la tectónica de placas y los eventos sísmicos, no son un vector, en ellos no existe longitud y dirección predictiva, el ser humano es tan corto en el espacio tiempo que por ahora solo puede documentar y realizar análisis de tendencia en tanto se desarrollan nuevas técnicas y métodos deductivos para identificar el génisis de los eventos sísmicos.
El año 2025 a nivel global, sin incluir las réplicas por debajo de 3°, hoy en día denota un incremento en su actividad sísmica comparada con el año 2024, con un incremento hasta ahora identificado en 10.92%. La actividad hasta ahora registrada por la USGS fue superada por los eventos del año 2021.

