SAT involucrada en contaminación con químico tóxico en zona 12 y Villa Nueva
Todo indica que la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) tiene una relación directa con la contaminación registrada en la zona 12 y Villa Nueva, ya que los contenedores que almacenaban terbufos —una sustancia altamente tóxica— estuvieron resguardados durante 26 años en el Almacén Fiscal bajo su administración.
Redacción
El Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales (MARN) denunció penalmente a la empresa Almacenadora del País, S.A. (ALPASA), tras confirmar que una sustancia tóxica, responsable de emanaciones que afectaron a vecinos de Villa Nueva, se almacenaba sin licencia ambiental.
Sin embargo, el caso revela una omisión aún más preocupante: los contenedores con el químico peligroso permanecieron durante 26 años bajo custodia de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), sin que la institución tomara medidas para su retiro o disposición segura.

SAT tenía bajo resguardo el químico
La SAT no solo permitió el almacenamiento de la sustancia —terbufos, un pesticida altamente tóxico— en su Almacén Fiscal, sino que estos recipientes permanecieron ahí desde hace más de dos décadas, y recientemente fueron alquilados por ALPASA. Aunque el MARN ya presentó una denuncia penal contra la empresa, no hay indicios de que la SAT enfrente consecuencias legales por su papel en esta cadena de omisiones.
Entre el 16 de junio y el 4 de julio, el MARN realizó inspecciones en Ciudad Real I y II, zona 12 de Villa Nueva, donde vecinos reportaban olores intensos, ardor en ojos, vómitos y otras afectaciones. Las autoridades ambientales, en conjunto con AMSA y el Ministerio de Salud (MSPAS), recolectaron muestras y determinaron que el terbufos filtrado al ambiente era la causa.
Empresa sin licencia y un sistema que no respondió
El producto estaba almacenado por ALPASA, que no cuenta con licencia ambiental, y se le exigió aislar y sellar los contenedores como medida urgente. El 11 de julio, el MARN interpuso la denuncia penal ante el Ministerio Público. Sin embargo, en el propio comunicado oficial se confirma que la sustancia había estado bajo resguardo estatal durante años, sin control técnico ni ambiental.
La falta de actuación por parte de la SAT ha generado indignación entre vecinos, ambientalistas y analistas legales. “No basta con denunciar a la empresa privada. La SAT debe explicar cómo es posible que una sustancia prohibida estuviera décadas bajo su responsabilidad sin ningún plan de manejo”, señaló un experto en derecho ambiental.
Hasta el momento, la SAT no ha emitido ningún comunicado ni ha aclarado si abrirá una investigación interna para determinar responsabilidades. Mientras tanto, los residentes de Villa Nueva conviven con los efectos de un químico que nunca debió haber estado tan cerca de sus hogares.