¿La izquierda confrontada? Solórzano Foppa califica a Jiménez de «torturador y corrupto»
Juan Francisco Solórzano Foppa, ex superintendente de la SAT y muy afín al oficialismo durante la campaña, criticó fuertemente a Francisco Jiménez, a quien cuestionó la compra de armas por varios millones a una empresa vinculada con la ministra de Cultura. Dicha empresa, Mundo de las Armas, provee al Estado años antes de que Grazioso fuera funcionaria, por lo que la indignación de Solórzano parece muy oportuna y podría ser «punta de iceberg» de la lucha entre las facciones del malogrado partido oficial.
Redacción
La compra de armas para el Ministerio de Gobernación (Mingob), por Q84 millones parece uno de los mayores puntos débiles para Francisco Jiménez, debido al impacto mediático de la noticia, en un ambiente donde la «lucha contra la corrupción» persiste como la bandera de los «buenos».
El video del ex candidato a la alcaldía por la coalición Semilla-URNG-Winaq, abunda en epítetos ofensivos y califica de «torturador» a Jiménez, quien en la conferencia del gobierno apareció con una pierna inmovilizada y bastón, mostrando una imagen de mayor debilidad si cabe.
La intervención de Solórzano Foppa, quien se presenta como adalid de la «lucha contra la corrupción», llama la atención, ya que no es primera vez que la empresa Mundo de las Armas surte al Estado con sus productos, desde municiones a pistolas y armas largas.
Que este personaje elija lanzar una de las primeras piedras contra Jiménez, podría indicar su adhesión a una de las dos facciones en las que se dividió el malogrado partido oficialista. Pero más allá de especulaciones, evidencia la profunda fractura en la izquierda política.
Mundo de las Armas, viejo proveedor del Estado
Lanzar la acusación directamente contra la titular de Cultura y Deportes, Liwy Grazioso, porque sus hermanos dirigen una empresa que ha proveído de armas a diferentes gobiernos desde hace varios años, por lo menos desde 2017, parece una campaña muy oportuna en un momento de ruptura entre los «raicistas» y «semilleros», facciones en las que terminó el partido de gobierno, luego de su cancelación legal.
El conflicto de interés es evidente, ya que la funcionaria es familiar de la empresa adjudicadora. Sin embargo, dicha empresa tiene 63 contratos con el gobierno que suman Q148,310.161.

Entre otras dependencias del Estado, el Ministerio Público (MP), firmó un contrato por Q312,763.26 con el Mundo de las Armas en el año 2013, cuando Semilla y sus aliados recién habían concluido los bloqueos al MP. Muchas son las instituciones que le compraron a esta empresa sus armas, municiones y otros insumos, antes de que Grazioso fuera funcionaria pública.

¿Incorrecto que sigan proveyendo al Estado? Por supuesto. Asimismo lo es el monto tan elevado de la transacción y que el gobierno guatemalteco tenga un solo proveedor de armas desde por lo menos 2017.
Sin embargo, es evidente que el tema se está usando como un argumento político que lejos de buscar esclarecimiento y transparencia, parece un arma más en la lucha entre los bandos del oficialismo.