“Si desaparecen, desaparecemos”: lo que las abejas hacen por ti y quizás no sabías
Cada 20 de mayo se celebra el Día Mundial de las Abejas, una fecha establecida por la ONU para recordarnos que estos pequeños insectos, a menudo invisibles en nuestras rutinas, son responsables de gran parte de la vida que conocemos.
Redacción
Las abejas no solo producen miel. De hecho, el 75% de los cultivos alimentarios del mundo dependen, en parte, de la polinización, según datos de la FAO. Sin ellas, alimentos básicos como frutas, vegetales, semillas y frutos secos escasearían, afectando la biodiversidad y la seguridad alimentaria global.

Pero su población está en riesgo. Estudios científicos advierten que el uso de pesticidas, el cambio climático, la deforestación y la agricultura intensiva han provocado la reducción drástica de colonias de abejas en todo el planeta. Por ejemplo, en algunas regiones de Europa, la mortalidad de abejas supera el 30% anual.
¿Por qué debería importarte? Porque sin abejas no habría manzanas, café, aguacates, ni siquiera chocolate. Además, su desaparición tendría un impacto directo en la economía agrícola y los ecosistemas silvestres.

La polinización natural que ellas realizan genera más de 200 mil millones de dólares al año en valor agrícola, según la Plataforma Intergubernamental Científico-Normativa sobre Diversidad Biológica.
En muchas culturas, las abejas también tienen un significado simbólico: representan el trabajo colectivo, la sabiduría natural y el equilibrio. En Guatemala, se han documentado prácticas ancestrales de apicultura en comunidades mayas que han mantenido vivas especies nativas como la melipona beecheii, una abeja sin aguijón y productora de una miel de alto valor medicinal.
