La mentira política…herramienta ideal de políticos fracasados
MSc. Mario Mérida
He tomado la idea de escribir este artículo después de leer la investigación de Hannah Arendt (2022), titulada “La Mentira Política”, con base en documentos de la guerra de Vietnam (1955-1975), desclasificados por el Departamento de Defensa de los Estados Unidos (1941), conocido comúnmente como “el Pentágono”.
El presente artículo hace referencia a las mentiras que algunos políticos fabrican, antes, durante y después de ejercer el poder, para evadir su responsabilidad por el incumplimiento de sus promesas de campaña y en consecuencia, de su fracaso en la gestión administrativa de la cosa pública, que se han convertido en un modus operandi seguido por gobernantes de izquierda o de derecha.
Inicialmente comparto la cita de Nuria Sánchez Madrid, prologuista del ensayo de Arendt, quien nos recuerda que: “… el ser humano resulta tan maleable que puede llegar a perder enteramente la conciencia de su propia condición si las circunstancias lo fuerzan a ella”. Vale decir, que el peligro extremo reside en la “capacidad de los regímenes totalitarios para lograr que la gente común olvide la diferencia entre la mentira y la verdad”.
El ensayo reafirma que el “engaño, la falsedad deliberada y la mentira descarada”, no son desconocidas para el ciudadano de a pie. En otras palabras, la mentira ha existido desde que el ser humano dejó de ser nómada. Aceptar esa afirmación, no significa consentir su empleo. Si no, alertar al ciudadano con relación a las falsas justificaciones de algunos funcionarios para encubrir su fracaso y corrupción.
La mentira política, es la técnica mayormente empleada por más de un seudo líder político para encubrir su incompetencia. Generalmente, la mentira es sostenida con acusaciones públicas contra funcionarios del pasado, haciéndolos responsables de la caótica situación del país. Discurso que, repetido constantemente, llega a ser aceptado como verdad por quienes están poco informados…Cuando, en realidad la verdadera razón es falta de liderazgo de los funcionarios de turno. Sin dejar de lado, que en el contexto actual también cuentan los desaciertos de los anteriores gobernantes desde la colonización hasta nuestros días.
Finalmente, comparto con los leyentes la siguiente frase de Vargas Llosa[1] (+), que va a tono con la mentira política: “En una sociedad cerrada el poder no sólo se arroga el privilegio de controlar las acciones de los hombres, lo que hacen y lo que dicen; aspira también a gobernar su fantasía, sus sueños y por supuesto su memoria”, con base a la mentira oportuna.
La mentira política se desmonta cuando quienes le salen al paso tienen una visión clara de la nación e intervienen aclarando la “idealización del imaginario”, creado y consolidado por gobiernos populistas mediante la amplia red digital de comunicación.
Pero ¿Cómo se enfrentan las mentiras políticas? Cada persona tendrá su particular forma de oponerse a las mentiras en general. Sin embargo, las mentiras políticas solo pueden ser enfrentadas con la verdad[2], formulada por actores reconocidos por su probidad. Por ejemplo, Centros de investigación académica sin sesgos ideológicos. Es decir, la investigación científica multidisciplinaria al servicio de la humanidad y, no de una corriente ideológica, política y económica, completada por el quehacer de un sistema de medios de comunicación, que provea información oportuna, veraz e imparcial. Además, del aporte solidario, moral y espiritual de las iglesias. Sumada a la institucionalidad legal responsables del orden constitucional y el Estado de Derecho.
El párrafo anterior, es la mejor respuesta para contrarrestar la vulnerabilidad ciudadana ante la mentira política. Aclarando que no “todos los políticos mienten”, como suele asegurarse.
[1] Citado en Gómez, Adolfo León. “Breve tratado sobre la mentira”. Edit. Universidad del Valle. 2003/ 2018/digital.
[2]f. Conformidad de las cosas con el concepto que de ellas forma la mente:veracidad, autenticidad, realidad, certeza. fidelidad, evidencia, exactitud, confirmación, efectividad, afirmación, justificación, aseveración, perogrullada, fetén. f. Conformidad de lo que se dice con lo que se siente o se piensa. f. Expresión clara, sin rebozo ni lisonja, con que a alguien se le corrige o reprende y f. realidad (‖ existencia real de algo).