Premio Estadista del Año para Arévalo: Respaldo canadiense pese a creciente descontento local
El premio Estadista del Año 2024 a Arévalo llega en medio de críticas locales por su gestión y promesas incumplidas, mientras «grupos extranjeros» siguen maquillando la imagen de su «elegido», ignorando el creciente malestar social.
Redacción
En un contexto marcado por crecientes críticas hacia su gestión, el presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo, emprendió una visita oficial de dos días a Canadá, donde será galardonado con el premio Estadista del Año 2024 otorgado por el Consejo Canadiense para las Américas (ACC).
Este reconocimiento, proviene de una entidad privada con vínculos importantes en el ámbito económico, académico y político con tintes progresistas, que ha levantado sospechas en diversos sectores de Guatemala, especialmente tras un año de gobierno caracterizado por la falta de soluciones a problemas estructurales como la crisis de infraestructura.
El premio otorgado a Bernardo Arévalo como Estadista del Año 2024 ha sido recibido con escepticismo, ya que esta organización no gubernamental, aunque influyente, representa una entidad privada.
Además, el ACC es conocido por organizar eventos exclusivos, como su próximo foro sobre Perspectivas Económicas y Políticas para América Latina, cuyo costo por entrada alcanza los 50.000 dólares canadienses. En este sentido, es más que obvio que esta distinción no proviene de una entidad oficial canadiense, sino de un grupo cuyos intereses económicos y políticos están alineados con los actores clave de la región.
Llama la atención que, tal como ocurrió durante el proceso electoral del 2023, grupos internacionales afines a la agenda globalista vuelven a salir en defensa de Arévalo, ignorando cuestionamientos locales sobre su desempeño.
En su breve gira, Arévalo tendrá encuentros con empresarios canadienses, recibirá una donación para los bomberos de Guatemala. Además, asistirá a eventos organizados por la CCA.
Sin embargo, lo que podría parecer un impulso diplomático para su administración, ha sido interpretado por analistas políticos en Guatemala como un intento de mejorar la imagen de un gobierno que, tras un año en el poder, acumula promesas incumplidas y enfrenta un descontento palpable en la población.
Analistas políticos han señalado que el respaldo de organizaciones internacionales como la OEA y otras figuras clave para la economía canadiense, incluidas empresas de renombre global, parecen priorizar intereses externos sobre las demandas internas del país.
El reconocimiento, que ignora temas críticos como el notorio fracaso para resolver la crisis de infraestructura, ha sido calificado como un acto que hace “oídos sordos” a las preocupaciones reales de los guatemaltecos.
Mientras tanto, en el ámbito local, las críticas hacia Arévalo y su equipo de gobierno se intensifican. Desde su llegada al poder el 14 de enero de 2024, las promesas de cambio han quedado rezagadas frente a la persistencia de problemas estructurales.