Narcobananos: la papa caliente que nadie quiere agarrar
Citados por la bancada VOS, funcionarios de gobernación y otras dependencias, evadieron responder algunas preguntas relacionadas con el alijo de droga incautado en República Dominicana desde 2006 que se encontraron 2.5 toneladas. Entre otros, se evitó mencionar que los contenedores de Chiquita se trasladaron en el barco Scorpios, de la naviera alemana Hapag Lloyd. El jefe de la Terminal Ferroviaria de Puerto Barrios y gerente de logística de Chiquita, Ramsés Lobo, evitó dar el nombre de esta empresa, que poco después circuló en cuentas de X.
Redacción
El ministro de Gobernación Francisco Jiménez; el viceministro Werner Ovalle, autoridades de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) y de la Autoridad Portuaria Nacional, acudieron al Congreso, donde el diputado Orlando Blanco, jefe de la bancada VOS; los cuestionó sobre el reciente escándalo suscitado cuando un cargamento de banano procedente de Guatemala, rumbo a Bélgica, resultó portador de 9.8 toneladas de cocaína, el mayor alijo descubierto en la historia de la República Dominicana, informaron sus autoridades.
Inmediatamente, el gobierno de Guatemala argumentó su inocencia, enfatizando en que el barco llegó a Puerto Barrios procedente de Veracruz, México y posteriormente hizo escala en Puerto Cortés, Honduras. Sin embargo, el comunicado oficial guatemalteco reconoció que en Puerto Barrios, «se agregó carga al manifiesto». Entretanto, Honduras fue muy enfático en informar que el barco no cargó ni descargó nada en su puerto.
Y República Dominicana (RD), a través de un alto funcionario de la autoridad antidrogas, expuso textualmente: «un contenedor procedente de Guatemala. Y según se ha establecido, varios individuos intentaron trasladar el alijo a otro contenedor» (pinchando en las letras, puede verse el video de RD). Es evidente que RD no expresó en ningún momento que el alijo se incluyó en el contenedor al llegar a su puerto multimodal Calcedo, como afirmaron las autoridades guatemaltecas, secundadas por algunos informativos locales.
El juego de «la papa caliente»
Como en el juego de «la papa caliente», los funcionarios guatemaltecos, azorados y a la defensiva, se trasladan la responsabilidad del enorme alijo que salió de Puerto Barrios para RD, milagrosamente oculto entre contenedores de banano que transportaba el barco Scorpios, de la Hapag Lloyd.
Al respecto, un interesante reportaje publicado en Narcodiario, fechado en mayo de 2024, expone que el 90% del trasiego de drogas se realiza por la vía marítima y detalla las navieras que han resultado más involucradas en ese delito, a las que califica de «favoritas de los narcos colombianos». De 11 empresas que menciona, la alemana Hapag Lloyd aparece en medio, con 19,394 kilos de cocaína incautados en sus barcos, entre 2016 y 2022.
La empresa naviera con más hallazgos criminales, según la revista citada, fue Maersk, con 72,859 kilos incautados en el período citado, y la menos usada por los narcos colombianos fue Cosco, con 216. Ambas empresas, Cosco y Maersk, aparecen como clientes de la Terminal Ferroviaria Puerto Barrios, administrada por Chiquita Guatemala S.A. hace décadas, detalla la página de la Terminal Ferroviaria.
Llama la atención que el jefe de la terminal y directivo de Chiquita, Ramsés Lobo, evitara mencionar a la naviera Hapag Lloyd, argumentando «confidencialidad», cuando al tratarse de un caso tan serio, es evidente que la confidencialidad pasa a un plano secundario. Especialmente porque Chiquita, como operador de la Terminal Ferroviaria, maneja la carga que transita por ese puerto.
Por su parte, Francisco Jiménez aseguró que la responsabilidad de los puertos corresponde a sus administradores, entidades privadas. Esto, pese a que el 24 de noviembre recién pasado, Jiménez lideró una comitiva oficial que viajó a Washington para recibir el CGAP+, «identifica deficiencias críticas en los sistemas de seguridad fronteriza de Guatemala y propone soluciones para fortalecer las capacidades institucionales».
El informe evalúa la seguridad en el aeropuerto La Aurora, puertos marítimos y fronteras terrestres. Además de los agradecimientos mutuos, ambos países quedaron comprometidos para combatir el tráfico de personas y drogas en todas las fronteras.
El alijo oculto entre un cargamento de bananos amenaza salpicar a las autoridades, especialmente si siguen evadiendo y derivando responsabilidades en un escándalo de tal magnitud. La ciudadanía merece una explicación seria y detallada, con nombres de los involucrados y todos los datos que puedan despejar dudas, sea que el alijo haya salido de Puerto Barrios, o no.
La citación de VOS dejó claro que el hallazgo del alijo en RD es una verdadera «papa caliente» que nadie quiere en sus manos, pero de la cual es imperativo que se deduzcan las responsabilidades hasta las últimas consecuencias, ya que de comprobarse negligencia o complicidad de funcionarios guatemaltecos a cargo, el escándalo podría implicar que el caso «narcobananos» convierta a Guatemala en un «narcoestado» ante los ojos de la «comunidad internacional».