Todd Robinson y su reunión con Jiménez: una historia de injerencias y cuestionamientos
El reciente encuentro entre Todd Robinson, subsecretario antinarcóticos de Estados Unidos, y las autoridades guatemaltecas vuelve a poner en el centro del debate una dinámica recurrente: la marcada injerencia del gobierno de Biden en los asuntos internos de Guatemala.
Redacción
El pasado 21 de noviembre, el ministro de Gobernación, Francisco Jiménez y el viceministro antinarcóticos, Werner Ovalle, se reunieron con Todd Robinson en Washington. Según el Departamento de Estado, el objetivo fue fortalecer la colaboración bilateral en temas de seguridad, con un compromiso financiero de USD 100 millones destinado a «fortalecer instituciones».
Sin embargo, este respaldo financiero ha generado dudas sobre las intenciones detrás de estas acciones, particularmente dada la reputación de Robinson y las controversias que lo rodean desde su período como embajador en Guatemala en 2015.
Un historial de denuncias
Todd Robinson ha sido señalado en múltiples ocasiones por presionar a funcionarios y diputados para impulsar reformas legales específicas. Además de, intervenir en procesos judiciales sensibles.
Las acciones de Robinson incluyen: la influencia indebida sobre operadores de justicia y la protección de figuras cuestionadas, incluidos exfuncionarios prófugos de la justicia.
Organizaciones y analistas advierten que las acciones del subsecretario antinarcóticos exceden los límites de la diplomacia, erosionando la soberanía del país bajo el pretexto de un supuesto fortalecimiento democrático.
¿Fortalecimiento democrático o injerencia?
La reciente reunión entre Jiménez y Robinson reaviva el debate sobre la verdadera naturaleza de la colaboración estadounidense. ¿Busca realmente construir un sistema institucional robusto o se trata de una herramienta para mantener influencia en los procesos judiciales y políticos de Guatemala?
Mientras el gobierno guatemalteco acepta estos aportes financieros, queda en el aire la pregunta sobre el precio a pagar: ¿Se está cediendo soberanía en nombre de la seguridad?