Israel mata al comandante de Hezbolá al cargo del ataque sobre Majdal Shams, en los ocupados Altos del Golán
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han confirmado la muerte del «terrorista» Jader al Shahabiya, el comandante del partido-milicia chií libanés Hezbolá al cargo de la división que ejecuto el pasado mes de julio un ataque sobre la localidad de Majdal Shams, ubicada en los Altos del Golán ocupados por Israel, donde fallecieron doce personas, todos ellos niños y adolescentes.
Por dpa
Según han detallado las autoridades militares israelíes, Al Shahabiya era el responsable de Hezbolá en la zona de las Granjas de Shebaa, una pequeña franja de territorio en disputa que hace frontera entre Siria y Líbano en los Altos del Golán. Israel acusa al miembro de Hezbolá de ordenar el lanzamiento de «misiles antiaéreos y antitanque» contra posiciones militares en la zona.
Doce civiles drusos israelíes, la mayoría menores de edad, murieron a finales de julio en Majdal Shams, en los Altos del Golán sirios ocupados por Israel, por el impacto de lo que según Israel era un cohete iraní lanzado por Hezbolá desde Líbano. La milicia islamista sin embargo niega cualquier implicación y atribuye el suceso a un proyectil antiaéreo de intercepción israelí.
La muerte de Al Shahabiya el miércoles víctima de un bombardeo de la División 210 de la Fuerza Aérea de Israel se produce en el marco de la ofensiva israelí contra posiciones de Hezbolá en Líbano. Desde mediados de septiembre las FDI han recrudecido sus ataques en territorio libanés, incluida Beirut, y han confirmado la muerte de gran parte de la cúpula del grupo, incluido su líder, Hasán Nasralá.
El repunte de las hostilidades se enmarca en los enfrentamientos desde hace cerca de un año, después de que Hezbolá atacara territorio israelí un día después de la ofensiva perpetrada el 7 de octubre de 2023 por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) y otras facciones palestinas –en la que murieron casi 1.200 personas y otras 240 fueron secuestradas– y que llevaron a Israel a desatar una cruenta ofensiva contra Gaza, que suma ya casi de 41.800 muertos.