La ESA localiza depósitos de sal en un antiguo cauce marciano
El orbitador marciano TGO (Trace Gas Orbiter) de la ESA ha revelado depósitos de sal de cloruro en la región llena de cráteres de Terra Sirenum (Mar de las Sirenas, en latín).
Por dpa/EP
Marte es actualmente un mundo desértico que hace unos 3.500 millones de años estaba cubierto de ríos, lagos y posiblemente océanos. Comenzó una era fría cuando Marte perdió su campo magnético y ya no pudo mantener su propia atmósfera, lo que provocó que el agua se evaporara, se congelara o quedara atrapada en la superficie.
A medida que el agua desaparecía con el tiempo, dejaba huellas minerales en la superficie. Una de esas huellas es esta estampa de color púrpura que el Orbitador de Gases Traza (TGO) de ExoMars de la ESA detectó en esta imagen infrarroja en color del lecho de un río seco en el hemisferio sur del Planeta Rojo.
El orbitador europeo utilizó su Sistema de Imágenes de Superficie en Color y Estéreo (CaSSIS) para revelar depósitos de sal de cloruro en la región llena de cráteres de Terra Sirenum. Lo más probable es que esos depósitos de sal se formaran a partir de estanques de agua o salmuera poco profundos que se evaporaron con el Sol. La gente utiliza un método similar para producir sal para el consumo humano en piscinas de agua salada en la Tierra.
Las aguas muy saladas podrían haberse convertido en un refugio para la vida, un faro para lugares habitables en Marte. Las altas concentraciones de sal permiten que el agua permanezca líquida a temperaturas tan bajas como -40 ºC. Los depósitos de cloruro en esta imagen y su relación directa con el agua líquida hacen que áreas como Terra Sirenum sean buenos objetivos para futuras misiones robóticas en busca de signos de vida, según informa la ESA.
El terreno con cloruro no se destaca en las imágenes normales en blanco y negro, pero aparece como un tono púrpura distintivo en las imágenes infrarrojas en color, lo que convierte a CaSSIS en una herramienta única para estudiar la distribución de sales en Marte.
Esta investigación se publicó en la revista Scientific Data de Nature. El nuevo artículo incluye datos nunca antes vistos que nos ayudan a comprender mejor la distribución del agua en el pasado distante de Marte.