Entre la espada y la pared…
ENTRE LA ESPADA Y LA PARED… ” (La gran impotencia de estar en medio de dos grandes males, presenta una realidad de lo que vivimos en nuestro país. Una guerra de poderes ambos nocivos al desarrollo, sobre un sistema corrupto por principio en donde sólo se buscan intereses particulares …)
Una guerra política que hemos vivido recientemente y seguimos viviendo…
Así como siempre lo mencionamos, somos de derecha y no queremos a los socialistas y chairos comunistas, porque no queremos que Guatemala caiga en las garras de esos poderes farsantes que promueven la miseria de los pueblos buscando sólo para ellos grandes riquezas y privilegios de poder.
Muy cierto, pero vemos en la derecha también un poder oscuro corrupto por principio que solo ve el derecho de su nariz, con abuso, prepotencia y privilegios. ¿No será por eso que existen estos farsantes vividores y resentidos de izquierda?
Ciertamente este fenómeno lo vemos en Latinoamérica, está cayendo la derecha, en las manos del peor cáncer de decadencia, promotores de miseria a raíz de sus ventajas y beneficios de poder a raíz del peor saqueo y corrupción. ¡Debemos ser realistas y entender que vivimos entre la espada y la pared…!
Desafortunadamente, por muchas razones y un sistema y clase política corrupto por principio, no existe en este momento una opción de Gobierno que represente el cambio que necesitamos. Estamos en medio de una guerra de poderes nefastos y nocivos ambos, para el desarrollo.
Cuando se cambien las leyes de partidos políticos e ingresen al quehacer político personajes íntegros y capaces, se respete la ley y la justicia y se aplique como debe ser, sin cooptación ni manejos a intereses de mafias y particulares, entonces la cosa podrá cambiar, antes es imposible.
Entiendo que esto es como pensar en tiras cómicas y cuentos de fantasía, porque nos preguntamos, ¿qué debe pasar para que esta situación pueda ser real? Cuando sabemos que nuestros problemas en la sociedad radican en una cultura, educación y falta de principios, de malas prácticas bien consolidadas y arraigadas…. ¡Verdaderamente complicado el tema…!