Puerto Santo Tomás: bloqueos revelan incapacidad del gobierno
El bloqueo en el Puerto Santo Tomás de Castilla sigue paralizando el movimiento de mercancías y generando pérdidas millonarias para exportadores e importadores. Según estimaciones, el país pierde hasta US$10 millones diarios mientras decenas de contenedores permanecen varados y al menos nueve buques esperan atracar.
Redacción
La protesta, que debería resolverse con mediación efectiva, evidencia la falta de capacidad del Ministerio de Gobernación y de otras autoridades para garantizar el funcionamiento de una infraestructura que mueve cerca del 40% de la carga nacional.
El silencio oficial y la demora en encontrar soluciones amenazan con afectar aún más la confianza de socios comerciales, justo en un momento clave: Guatemala se prepara para la auditoría de la Guardia Costera de Estados Unidos y la llegada de agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP).
La crisis pone en entredicho la supuesta “eficiencia” de las políticas de seguridad y gobernanza del Ejecutivo, que parecen más centradas en anuncios que en resultados concretos.
El cierre de operaciones retrasa la cadena logística, eleva los costos operativos y compromete la competitividad de las empresas que dependen del flujo constante de exportaciones e importaciones.
El impacto va más allá de lo económico. Miles de trabajadores portuarios, transportistas, agentes aduaneros y colaboradores del sector logístico enfrentan suspensión de actividades e incertidumbre laboral, lo que agrava la dimensión social de la crisis.
