OEA: Guatemala avaló censura contra libertad de expresión
Claudia Escobar, la representante permanente de Guatemala ante la OEA, no se expresó ante el «consenso obligatorio» que pretende imponerse en el mundo, donde cualquier referencia favorable a la libertad individual, la vida desde la concepción, la familia tradicional o el cristianismo podría llegar a convertirse en delito «de odio».
Redacción
Como era de esperarse, la representante guatemalteca avaló la propuesta de censura de la OEA, que «condena los discursos de odio, incluyendo en el ámbito digital, por ideología política y otros motivos». Esto parece alarmente ya que podría abrir la puerta a la censura contra todo el que no avale el discurso dominante que la Agenda 2030 pretende imponer.
Lo grave es que de resoluciones, puedan pasar a legislaciones que promuevan leyes para callar a las voces disidentes al orden que busca imponer la Agenda 2030.
Es grave que el gobierno guatemalteco respalde la intención de censura expresada en la resolución de la OEA contra las «expresiones de odio». No hay odio mayor que callar a quien pretende opinar.
La responsabilidad queda en manos del Congreso guatemalteco, que deberá aprobar o improbar cualquier disparatada normativa que derive de la resolución de la OEA promoviendo la censura e incluso la persecución a opiniones que discrepen del «nuevo orden mundial» tan anhelado por organismos como la OEA.
