Mientras Jiménez da entrevistas, los vecinos hacen justicia por su cuenta
Aunque el ministro de Gobernación, Francisco Jiménez, aseguró haber dado la orden de atender la emergencia tras los sismos del 8 de julio, dicha instrucción no se tradujo en una presencia efectiva del Estado en las zonas más afectadas, como Santa María de Jesús, Sacatepéquez. A pesar de los daños estructurales y la crisis humanitaria que enfrentaba la comunidad, no se desplegó el resguardo necesario para proteger a los vecinos.
Redacción
A sabiendas de que el municipio permanecía sin energía eléctrica y que decenas de familias dormían en la intemperie por temor a nuevos colapsos, las fuerzas de seguridad brillaron por su ausencia. La falta de patrullajes y vigilancia permitió el avance de supuestos delincuentes que, según los propios vecinos, aprovecharon la oscuridad y el desconcierto para irrumpir en viviendas y robar pertenencias.
Cinco personas murieron linchadas y calcinadas en Santa María de Jesús, Sacatepéquez, la noche del miércoles 10 de julio. Pobladores los acusaron de ingresar a viviendas para robar mientras las familias dormían a la intemperie tras los sismos registrados desde el martes. A pesar de las reiteradas advertencias de la comunidad sobre la falta de luz, agua y el aumento de asaltos, las fuerzas de seguridad no acudieron al llamado de los pobladores.
El caso refleja no solo la desesperación de una población desprotegida, sino también la incapacidad del Estado para responder a tiempo. Mientras el Gobierno habla de coordinación y presencia institucional, en Santa María de Jesús los vecinos tomaron la justicia en sus manos ante el abandono de las fuerzas de seguridad.
Linchan a cinco presuntos saqueadores
Los fallecidos habrían sido sorprendidos saqueando casas durante el apagón que afectó al municipio. Vecinos los identificaron como parte de una supuesta banda conocida como Los Frijoles, acusada de operar en la zona aprovechando la emergencia.
Videos difundidos en redes sociales muestran a los pobladores sometiendo a los presuntos delincuentes mientras elementos del Ejército intentaban, sin éxito, contener la situación. Las víctimas fueron golpeadas y luego quemadas en plena vía pública.

El ministro de Gobernación, Francisco Jiménez, declaró que los hechos se originaron por “el robo de una bolsa de frijol y otros objetos”, y lamentó la tragedia. Sin embargo, también admitió que Santa María de Jesús seguía sin electricidad la noche del incidente, reconociendo así el contexto de vulnerabilidad que él mismo había ordenado atender días antes.
EEGSA informó que el servicio eléctrico fue restablecido hasta las 23:40 horas del jueves 10 de julio, casi tres días después del sismo inicial. Durante ese tiempo, vecinos habían solicitado mayor presencia policial y denunciado constantes robos en calles y viviendas.
La Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) confirmó que de las siete muertes registradas por la secuencia de sismos, cinco ocurrieron precisamente en este municipio.