Endogamia y canibalismo, prácticas y costumbres propias de la izquierda
Quod Pertinet-Internacional
La presencia de la izquierda en cualquier escenario se manifiesta no solo por el tufo cáustico que sus representantes exhalan, sino también por las retorcidas formas y trastornado aspecto que resultan teniendo todos sus engendros debido a las prácticas y costumbres que caracterizan su proceder. La ENDOGAMÍA CANIBAL,que ha sido recientemente extendida a la política por el usurpador de la presidencia de Guatemala Bernardo Arévalo y por sus cómplices con el cancelado partido político Movimiento Semilla, parece calcada de lo que en Colombia hicieran el también usurpador de la presidencia y aún impune GENOCIDA Petro Urrego y secuaces con sus engendros políticos denominados “Colombia Humana” y “Pacto Histórico”.
Antes de avanzar, importante hacer claridad en cuanto al significado de algunos términos. La Asociación de Academias de la Lengua Española define a la ENDOGAMIA como” la práctica de contraer matrimonio entre si de personas de ascendencia común, naturales de una misma localidad o comarca, o de un mismo grupo social”. Esta respetada autoridad de la lengua española define al CANIBALISMO como “la costumbre de comerse a los de la misma especie”. Estoy convencido que tanto lo sucedido actualmente en Guatemala con ese engendro político de la izquierda denominado “Semilla”, como lo sucedido hace poco en Colombia con esos esperpentos políticos denominados “Colombia Humana” y “Pacto Histórico” ilustran cómo las orgías de corruptas prácticas e ilegales costumbres en las que se involucran los de la izquierda, resultan creando unas deformidades judiciales que además de delatarles, se vuelven en su contra.
Respetando el orden cronológico y la condición de referente inspirador que la criminal izquierda colombiana parece ser para sus camaradas en Guatemala, empecemos por ocuparnos de la aberración que gracias a la ENDOGAMIA CANIBAL resultó pariendo la izquierda criminal en Colombia a finales del año 2021. Cuando Petro Urrego, como candidato avalado por un autoproclamado “grupos significativo de ciudadanos Colombia Humana”, pierde en segunda vuelta las elecciones presidenciales en el 2018 contra el Señor Iván Duque Márquez, quiso aprovechar los millones de votos que aparecieron a su favor en esta contienda presidencial para salvar la personería jurídica del agonizante movimiento político que avaló su postulación. Para ello, radicó ante el Consejo de Estado (una de las 4 altas cortes colombianas), un recurso jurídico exigiendo que, contrario a lo estipulado en el Artículo 108 de la Constitución Política, se le reconocieran los 8 millones de votos que le aparecieron para las presidenciales (equivalente al 42% de los votos válidos), en vez de la insignificante cantidad de votos válidos que obtuvo en las elecciones legislativas (500,000).
Como cosa rara, en esta ocasión el Consejo de Estado se ciñó al ordenamiento legal vigente (Artículo 108 de la Constitución Política) y negó la personería jurídica a ese agonizante movimiento político por cuanto su votación en la contienda para el Congreso (legislativas) no había superado en cantidad el mínimo requerido de los votos emitidos válidamente para esta contienda. Así lo ordena la Constitución Política, punto, sencillo, más claro imposible, no hay posibilidad de interpretación… Creería uno.
Como era de esperarse, la llorona y criminal izquierda colombiana presenta recurso ante otros de sus camaradas en las altas cortes, pero esta vez ante la Corte Constitucional. Sin que sorprendiera a quienes les conocemos y padecemos, mediante sentencia proferida el día 16 de Septiembre del 2021, esta segunda y superior instancia decide que se le deben reconocer los votos obtenidos en las elecciones presidenciales a la “Colombia Humana” para garantizar siga existiendo como persona jurídica, independiente de lo que claramente estableciese la aún vigente Constitución Política. Aunque este ilegítimo e ilegal pronunciamiento debía resultar en todo un logro que destrabaría la aspiración presidencial del 2022 a la criminal y corrupta izquierda colombiana, no fue así. Resulta que su protegido y mayor representante, el aún impune GENOCIDA Petro Urrego, a raíz del adverso fallo de primera instancia emitido por el Consejo de Estado en el 2018, se le había ocurrido malparir otro engendro politiquero en su desespero por poder aspirar nuevamente a la presidencia y burlar el calendario electoral: El Tal “Pacto Histórico” … ¡Y juaaaaaa, así fue como se manifestó la ENDOGAMIA !
¿Muy enredado este asunto? Por supuesto, ¿¡cómo no si es la izquierda estúpida!? Me explico: El tal “Pacto Histórico” fue una legítima y lícita coalición creada el 11 de febrero del 2021 e integrada por siete (7) partidos independientes de la izquierda colombiana (entre ellos “Colombia Humana”) que no habían obtenido de manera individual más del 15% de los votos válidos en los comicios legislativos del 2018. Pues resulta que al reconocérsele en el 2021 la personería jurídica a la “Colombia Humana” por los 8 millones de votos que le aparecieron en las presidenciales del 2018 (sin importar lo que estableciese la Constitución Política), el tal “Pacto Histórico” no podía seguir haciendo parte del “Pacto Histórico” que había creado porque conforme al Artículo 262 de la Constitución Política, tan solo pueden constituir alianzas, coaliciones, o adhesiones bancadas independientes que no hayan obtenido más del 15% de los votos válidos en unos comicios… ¡Y juaaaaaa, así fue como se manifestó el CANIBALISMO ! ¿Cierto que divinas las altas cortes?
Ahora veamos las similitudes que creo lo sucedido con la criminal y corrupta izquierda de Colombia tiene con lo que actualmente están padeciendo sus camaradas en Guatemala. Como resultado de delaciones e investigaciones adelantadas por autoridades electorales, administrativas y judiciales de Guatemala, se pudo determinar que el proceso de constitución y trámite de la personería jurídica del partido político “Movimiento Semilla” que pusiera en la Presidencia al Señor Arévalo, incluía irregularidades en la formalidad de algunas de sus actas, así como la inscripción, mediante la usurpación de identidad, la falsificación de documentos, y la resurrección de personas fallecidas, de poco más de cinco mil ciudadanos como supuestos miembros de esta colectividad. Estos serios y graves indicios resultaron en que en el mes de Julio del año 2023, el Ministerio Público (MP) abriese un expediente penal contra esta colectividad política dirigida por el ahora usurpador de la Presidencia.
Con el descarado y poco disimulado propósito de anticipar y tratar de contrarrestar una indefectible resolución penal que ordenase al Tribunal Supremo Electoral (TSE) cancelar la personería jurídica del partido político “Movimiento Semilla” que usurpó la presidencia, la bancada oficialista en el Congreso logró tramitar la exclusiva y puntual reforma de una Ley contra la delincuencia organizada, que evitaría se le cancelara la personería jurídica del al parecer ilícito e ilegítimo partido que puso presidente… Y con esta jugarreta la izquierda de Guatemala mostró que practica la ENDOGAMIA CANIBAL por cuanto, según lo reconociera una de las diputadas de ese ilícito movimiento político, resulta que el usurpador de la Presidencia todavía figura como secretario general de este bodrio! Bellos los diputados oficialistas, ¿no?
Es tan burdo, tan torcido, y tan tramposo el proceder de la izquierda, que no obstante y contar con corruptos en todos los niveles de los poderes públicos, ni siquiera para cometer ilícitos y salirse con la suya sirven: Creyeron que mantener el partido vivo era un triunfo, y para ello acomodaron la Ley a su conveniencia, y resulta que mantener el partido vivo les condena también… Veamos. Durante las investigaciones adelantadas por el Ministerio Público, los representantes de Semilla mintieron a las autoridades manifestando que el Señor Arévalo había renunciado a su cargo de secretario general de esta colectividad para poder desempeñarse como presidente. Como estos mismos sujetos decidieron mantener con vida a esa colectividad, ahora resulta que conforme lo establece el Artículo 32 de la Ley Electoral y de Partidos Políticos (LEEP), el cargo de secretario general de un partido político (activo) es incompatible con el desempeño de un cargo público en el poder Ejecutivo… ¡Y juaaaaaa, con ustedes una Semilla en Guatemala de la ENDOGAMIA CANIBAL!
Gracias al contubernio, a las trampas, a la connivencia y a los entuertos mediante los cuales han surgido esos engendros de la izquierda corrupta llamados “Colombia Humana”, “Pacto Histórico” y “Semilla”, entre otros – resultado todos de cruces, de maridajes, de romances y de calenturas entre individuos de la izquierda Iberoamericana – los tan numerosos y costosos como desprestigiados poderes legislativos y altas cortes de nuestras naciones hermanas, acaban de crear una nueva, exclusiva y potencialmente terminal enfermedad para sus adorados camaradas usurpadores de presidencias: La ENDOGAMIA CANIBAL.
Algunos de los defectos que pueden resultan y hacerse visibles en las personas a raíz de la ENDOGAMIA CANIBAL que creo ahora aqueja a la izquierda Iberoamericana, incluidas la guatemalteca y la colombiana, son, entre otros, una fertilidad reducida (¡buenísimo!), mayor mortalidad (¡soñado!), una fertilidad reducida (¡maravilloso!), tamaño adulto más pequeño (evidente), mayor riesgo de enfermedad cardiovascular (¡ojalá!), mayor asimetría facial (les caracteriza), y mayor riesgo de trastornos genéticos (¡imposible!).
François R. Cavard M.