«La lectura como ritual combate el estrés navideño»
La época navideña puede resultar estresante para muchas familias, por lo que las actividades típicas como abrir calendarios de Adviento, hornear galletas o leer y escuchar cuentos pueden ser una forma de disfrutar en familia, según la Fundación para la Lectura de Alemania.
Por dpa
«Fuera el estrés, bienvenidos los cuentos», afirmó en entrevista con dpa Sabine Uehlein, directora general de la fundación. «El periodo prenavideño es también una época difícil para muchas familias. Sin embargo, los rituales de Adviento pueden complementarse bien leyendo cuentos juntos». En algunas familias se han desarrollado rituales que se prolongan más allá de esta época del año, añadió.
Uehlein explicó que uno de cada tres niños carece de experiencias formativas de lectura en voz alta, que sientan bases importantes para aprender a leer. La falta de tiempo, el estrés cotidiano y la inquietud o desgana son razones que los padres aducen a menudo para no leer a sus hijos. Muchos padres también carecen de un modelo a seguir, porque «tampoco les leyeron en el pasado».
El papel de los audiolibros
Alemania tiene una larga tradición de audiolibros. «Los libros de 24 capítulos incentivan la lectura diaria y mantienen la emoción hasta Navidad», explicó Uehlein.
Estas historias de tres minutos también pueden ser leídas por varias personas. «Es especialmente divertido leerlo repartiendo los papeles», indicó.
Los audiolibros no sustituyen a la lectura en voz alta, pero son un buen aperitivo, dijo Uehlein. Mientras los bizcochos navideños están en el horno, un capítulo del audiolibro puede abrir el apetito de la lectura.
También se puede hacer manualidades o dibujar mientras se lee en voz alta. Si los niños tienen preguntas sobre la historia que han oído o leído en voz alta o quieren hablar de ella, «eso es bueno y demuestra que les interesa la historia», comentó Uehlein.
La experta subrayó asimismo que quien quiera regalar libros a los niños por Navidad debe asegurarse de que son adecuados para ellos. «A los niños a los que no les gusta leer no hay que regalarles un tomo de 500 páginas». A veces, un cómic sobre una serie favorita o una aplicación sobre un personaje venerado son la elección adecuada.
Los padres también pueden simplemente elegir algo junto con sus hijos en una librería, recomiendó.
