Jorge Chavarría: «El peso de lo frágil»
En su más reciente exposición, «El peso de lo frágil”, el fotógrafo autodidacta Jorge Chavarría nos invita a un viaje que explora las contradicciones del poder, la fragilidad y la naturaleza.
Redacción
Jorge Chavarría, conocido por su enfoque innovador y multidisciplinario, combina la fotografía documental con elementos de diseño y arte contemporáneo. A través de técnicas que mezclan procesos antiguos del siglo XIX con métodos modernos, Chavarría construye un lienzo de trabajo que reflexiona sobre la cultura, el paisaje y la identidad.
La muestra, una mezcla de retratos introspectivos, naturaleza efímera y panorámicas azules, despliega una narrativa visual que desafía las convenciones tradicionales de poder y ostentación.
El trabajo de Chavarría es, ante todo, artesanal. Todas las imágenes de la muestra fueron impresas utilizando los procesos fotográficos de Kallitipos (1885) y Cianotipos (1842). Estas técnicas, que requieren la preparación manual de cada pieza en un cuarto oscuro, elevan cada fotografía al rango de obra única, comparable a una pintura hecha desde cero.
“El Kallotipo y el Cianotipo tienen una estética completamente única y distinta, que no se logra con métodos modernos. Hacer cada imagen es un proceso complejo, pero el resultado final transmite una sensación irrepetible, una conexión con la tradición y la contemporaneidad”, explica el artista.
Las técnicas empleadas no solo evocan la estética del pasado, sino que también refuerzan la idea de fragilidad y artesanía. Este enfoque híbrido, que combina la tecnología digital con procesos históricos, le permite a Chavarría reimaginar las posibilidades de la fotografía contemporánea.
Conversamos con Jorge Chavarría para conocer más sobre el significado de su obra y el proceso creativo detrás de ella.
¿Cuál es el significado del título «El peso de lo frágil»?
El nombre está relacionado con la intención de la serie: buscar destruir o suavizar esa imagen de poder y violencia que se asocia a los símbolos tradicionales de los imperios. Se trata de repensar estos símbolos de una manera menos agresiva. Lo frágil tiene que ver con el material que utilicé para las coronas, que son réplicas hechas en tusa de maíz.
El maíz tiene un significado profundo en nuestro contexto, no solo como un sustento básico, sino también como un producto directo de la naturaleza.
¿Qué técnicas fotográficas utilizas?
Utilicé fotografía digital y película fotográfica de formato medio, combinando ambos procesos en un híbrido. Esto me permite trasladar imágenes digitales a medios fotográficos del siglo XIX. Las imágenes finales están impresas utilizando Kallitipos (1885) y Cianotipos (1842), procesos complejos, pero con una estética única, que convierten cada imagen en una pieza completamente hecha a mano, casi como una pintura.
¿Cuánto tiempo te tomó conceptualizar y realizar esta muestra?
La exposición está compuesta por tres series: «Natura – Dalias», «Estar / No Estar» (los retratos) y «Metapaisajes» (las imágenes panorámicas en azul). Los retratos fueron la serie más reciente y resultaron ser un reto, ya que necesitaba una estética específica, con imágenes impactantes que, como conjunto, transmitieran un mensaje claro.
¿De dónde surge la inspiración para este proyecto?
Para la serie «Estar / No Estar», fue presenciar la coronación del rey Carlos de Inglaterra, un evento lleno de excentricidades, ostentoso, una representación del saqueo continuo por siglos, generaciones de otros países y de su misma gente, mismo evento que sucede en nuestro país y el resto de países latinoamericanos.
Hay muchas lecturas para esta serie, otra que le he dado es la de uno mismo situarse en una situación de «poder», donde uno mismo es el que decide sobre las reglas, direcciones y decisiones que uno toma en su vida.
¿Hay alguna historia o experiencia personal que haya marcado tu enfoque hacia el tema de la fragilidad en esta muestra?
Si totalmente, al vivir en sociedad, estamos a merced de muchas cosas negativas que las mismas ciudades o entornos políticos y sociales nos afectan, nos hace sentir frágil el vivir en ciertos espacios, lo mismo sucede al estar en medio de la nada dentro de la naturaleza, es esa reflexión sobre qué tan sensibles/frágiles somos en cualquier entorno.
En los retratos, los sujetos aparecen con los ojos cerrados. ¿Qué simboliza?
Es un gesto contrario a la forma en que los retratos de personas poderosas suelen presentarse, siempre mostrando orgullo e imponiendo su presencia. En mi serie, cerrar los ojos y cubrir los rostros símbolo de reflexión, paz y fragilidad.
¿Qué mensaje esperas que transmitan estos detalles?
Quiero que los retratos inviten a reflexionar sobre las dinámicas de poder a lo largo de la historia y cómo esas dinámicas deben cambiarse para el bien común de todos.
«El peso de lo frágil» estará expuesto en Galería Sol del Río, ubicada en la 14 Avenida 15-56, Zona 10, hasta el 30 de noviembre. Una muestra que trasciende lo visual y se convierte en una experiencia contemplativa que invita a repensar nuestras propias nociones de fragilidad y poder.
