¿Implicada en desfalco o «activista exiliada»? Carmen Rosa de León critica a Consuelo Porras
Carmen Rosa de León Escribano, con varias acusaciones y solicitud de extradición por defraudar más de un millón de quetzales a USAID, cuestionó a la Fiscal General Consuelo Porras por negarse a renunciar, aunque las leyes vigentes son claras al respecto. De León es oficiosamente defendida por el «net» pro gobierno y la prensa izquierdista, que evitan mencionar el delito de la académica, denunciado por USAID.
Redacción
Según el «netcenter» del oficialismo y los medios afines al gobierno de turno, Carmen Rosa de León es una activista que sufre persecución política y por esto, debió partir a España. Sin embargo, la académica y promotora del desarme, lejos de ser activista, era la próspera propietaria de una ONG y estuvo involucrada en el caso Asodefir.
Según los medios, De León y otros 13 individuos estuvieron implicados en fraude, asociación ilícita y estafa, por US$216 mil 787, «para facilitar el acceso a servicios financieros a comunidades». El dinero fue usado por los señalados para comprar acciones del Banrural y De León, ciudadana española, partió hacia un país que no extradita a sus ciudadanos.
Hoy reaparece para cuestionar las declaraciones de Consuelo Porras, quien encabeza el ente que develó el caso Asodefir, ocultado cuidadosamente durante varios años por la FECI de Sandoval y Thelma Aldana. Llama la atención ya que De León tiene «conflicto de interés» o mejor dicho, un interés muy puntual en buscar que el nuevo gobierno (afín a su ideología), logre autoridades judiciales a la medida de todos los implicados en la estafa a USAID y a los campesinos que serían beneficiarios.
El toque de color al comentario de la empresaria prófuga es el aura de inocencia y rectitud que los afines al gobierno le imprimen, ocultando «bajo la alfombra» el vergonzoso crimen de Asodefir, donde los «más vulnerables» fueron pretexto para que un grupo de burócratas izquierdistas se convirtieran en accionistas bancarios.