Guatemaltecos demuestran repudio a Miguel Martínez, mientras Giammattei “intercambia soberanía por impunidad”
Ayer, durante un partido entre la selección nacional y El Salvador, guatemaltecos expresaron su repudio a la figura de Miguel Martínez, amigo cercano de Alejandro Giammattei, quien según afirmó Ricardo Méndez Ruiz en sus redes, estaría «haciendo trueque” la soberanía de Guatemala “a cambio de una falaz impunidad”.
Redacción
La escena pareció salida de esas películas sobre la Roma antigua, donde el pueblo harto abucheaba en el circo a los favoritos de los emperadores. Ayer, miles de guatemaltecos indignados lanzaron diversidad de improperios contra Miguel Martínez, conocido por su cercanía con Alejandro Giammattei, y quien pese a no ser un personaje político, acumuló poder y fortuna durante este gobierno, que al llegar a su fin, resulta ser uno de los más cuestionados y que menos obras dejará.
Si por algo será recordado Alejandro Giammattei es por la enorme cantidad de promesas incumplidas, que van de reducir la desnutrición a la construcción de siete hospitales. Así como fue pródigo en prometer, también logró que se aprobaran los presupuestos más altos e ineficientes de la historia, que incrementaron sustancialmente la deuda nacional sin que existan obras de gobierno visibles (exceptuando las acciones clientelares que le valieron al oficialismo elegir más de cien alcaldes).
Ante los señalamientos reiterados de fraude electoral en la primera y segunda elección, Giammattei permaneció en silencio, y recientemente, evidenció su aval al ganador de la segunda vuelta, diputado Bernardo Arévalo, pero también mostró su obsecuencia ante funcionarios internacionales que han tenido evidente injerencia en el proceso electoral.
Según el presidente de la Fundación Contra el Terrorismo (FCT), Ricardo Méndez Ruiz, Giammattei habría consentido en avalar el supuesto fraude a cambio de la impunidad ofrecida por el Departamento de Estado y la Unión Europea al presidente y a su amigo.
Méndez Ruiz añade en su cuenta de X, que “el encargado de la persecución penal es el MP”, cuya titular Consuelo Porras tendría en sus manos el destino del presidente. Sin embargo, queda la duda sobre por qué, con un listado tan enorme de indicios y hechos que habrían motivado la indignación o siquiera la solicitud de antejuicio contra cualquier otro mandatario, a fin de poder investigarlo, para Giammattei ha habido mucha tolerancia del MP.