Experta en Picasso, cree que el ‘Guernica’ está «fantásticamente bien» en el Museo Reina Sofía
Genoveva Tusell, hija del negociador de la vuelta del cuadro a España, recuerda no obstante que el pintor deseaba estar con los «grandes maestros» en el Prado.
Por dpa/EP
La experta en Picasso y doctora en Historia del Arte, Genoveva Tusell, cree que en la actualidad «no tendría sentido» trasladar el ‘Guernica’ al Museo del Prado, pese a que fue la «voluntad» del artista malagueño porque «él se quería confrontar con los grandes maestros».
«Teniendo en cuenta lo bien expuesto que está en el Museo Reina Sofía, lo bien cuidado y lo bien exhibido que está, creo que no tendría sentido ninguno moverlo. Está fantásticamente bien en el Reina Sofía», ha asegurado Tusell en una entrevista con Europa Press, con motivo del 142 aniversario del nacimiento de Picasso y tras el 42 aniversario desde que la obra más emblemática de Picasso se expusó en España por primera vez (24 de octubre de 1981).
Genoveva Tusell, que ha calificado el ‘Guernica’ como «el último exiliado», vivió de cerca la negociación con el Museo de Arte Moderno (MOMA) de Nueva York para la devolución del mural porque su padre, Javier Tusell, era entonces director general de Bellas Artes en España. La experta ha insistido en que el Reina Sofía se creó alrededor de el ‘Guernica’ y ha recordado que hubo mucha «polémica» en sus primeros años.
«Muchos de los implicados, entre otros, mi padre Javier Tusell, se mostraron en contra de ese traslado al Reina Sofía. Creo que ahora el mejor sitio donde puede estar es en el Reina Sofía. Y, por supuesto, las condiciones de conservación desaconsejan que se preste o que se mueva a cualquier otro lado, aunque sea temporalmente», ha afirmado.
Tusell ha recordado que el regreso de la obra a España fue una labor «muy complicada». «El primer intento por recuperar la obra fue en 1968, que aún estaba todavía Franco en el poder. Se estaba construyendo el que sería el Museo Español de Arte Contemporáneo y lo que se pensó era que el ‘Guernica’ podía ser la estrella de ese nuevo museo. Se sabía que había sido un encargo de la República, que era propiedad española, y entonces el propio general Franco dio su visto bueno y encargó a Carrero Blanco que hiciera averiguaciones y que comenzara a solicitar información al MoMA», ha relatado.
Este primer acercamiento resultó ser un «fracaso» porque, como ha añadido Tusell, Picasso, en cuanto conoció las intenciones de Franco llamó a su abogado y redactó un documento en el que estableció las condiciones del depósito en el MoMA. «Las condiciones fueron que la obra no regresaría a España hasta que se reinstaurara la República. Después, por consejo de su propio abogado, cambió un poco esa explicación y lo sustituyó por cuando volvieran las libertades públicas a nuestro país», ha indicado.
A partir del año 79 se puso en marcha el regreso de la obra de una manera mucho más «decidida», que finalmente se logró en 1981. «Picasso siempre quiso regresar a España, siempre resaltó su españolidad, pero tenía muy claro que no vendría mientras en España hubiese una dictadura», ha asegurado Tusell.
«La obra creo que significa el punto final de unos años malos en España y su llegada estuvo acompañada de muchas cosas, para muchos artistas significó su vuelta del exilio», ha comentado, antes de añadir que en la actualidad es una «llamada de atención» y un recuerdo del «pasado español».
‘GUERNICA: EL ÚLTIMO EXILIADO’
Para celebrar los aniversarios del nacimiento de Picasso de la primera vez que el ‘Guernica’ se expusó en España, el director de cine, Guillermo Logar, ha estrenado recientemente el documental ‘Guernica: El último exiliado’ en el que participan Manuel Borja-Villel, ex director del Museo Reina Sofía, o Genoveva Tusell, entre otros.
El cineasta afirma en declaraciones a Europa Press que el proyecto surge a través de la Subdirección General de Archivos Estatales de España y del programa Europa Creativa de la Unión Europea. «Lo que buscaban era que diferentes cineastas, a partir de un archivo pudieran hacer un cortometraje de 20 minutos, en el que se pusiera en valor el papel de los archivos a la hora de contar una historia», ha comentado.
Logar empleó como referencia el libro de Tusell (El Guernica recobrado), lo que le sirvió para aprender sobre un momento «crítico» de la historia española en el que se puso la cultura en el «punto central» de la acción política. «No solo he aprendido cosas de Picasso sino también sobre el propio país», afirma.
En este sentido, reflexiona sobre la importancia que sigue teniendo la obra en la actualidad, sin importar la edad o nacionalidad de su público. «Ahora podemos estar viendo imágenes de bombardeos en Gaza y podemos identificar y ver algo de lo que Picasso probablemente vio en el momento en el que pintó la obra», ha asegurado.