Embajador de EE.UU. visita a Stuardo Campo: ¿Injerencia diplomática o apoyo solidario?
El reciente gesto del embajador de Estados Unidos en Guatemala, Tobin John Bradley, al visitar en prisión a Stuardo Campo y compartir públicamente su apoyo en redes sociales, genera una serie de interrogantes sobre la independencia de los jueces y el debido proceso en Guatemala.
Redacción
La embajada de Estados Unidos en Guatemala público en su cuenta oficial de X, la visita del embajador Tobin John Bradley a Stuardo Campo. En la publicación, la embajada destaca el profesionalismo y colaboración con las autoridades estadounidenses. Por último, dice esperar se «cumpla la debida diligencia judicial».
Este tipo de acciones pueden ser vistas como una transgresión a la autonomía de los jueces, especialmente en un contexto donde el Departamento de Estado de Estados Unidos ha sancionado a numerosos políticos, abogados, fiscales y magistrados que no se alinean con los intereses de la embajada y el gobierno de Biden.
La percepción de que estas sanciones y acciones diplomáticas responden a intereses particulares podría socavar la confianza en la imparcialidad y la independencia del poder judicial. Asimismo, la opinión de un diplomático en un caso judicial interno podría interpretarse como una forma de presión sobre el sistema judicial guatemalteco.
La visita de Bradley y su mensaje de solidaridad hacia Stuardo Campo no deben ser ignorados en este análisis. Campo, quien fue conocido por su estrecha cooperación con la extinta CICIG, ahora enfrenta un proceso judicial en Guatemala.
La presencia y apoyo del embajador, aunque puedan ser vistos como gestos diplomáticos, también podrían percibirse como intentos de influir en el curso de la justicia, poniendo en riesgo los principios de imparcialidad y debido proceso.
La pregunta que surge es: ¿Hasta qué punto la intervención diplomática de la embajada de Estados Unidos afecta la percepción de justicia en Guatemala?