Controversia en el Congreso: Zapeta responde en k’iche’ y elude dudas sobre ejecución de comedores
Durante una citación en el Congreso, la viceministra Bertha Zapeta habló en k’iche’, asegurando que se dirigía al pueblo de Sololá. A lo que el diputado Sergio Enríquez respondió exigiendo respuestas claras en español sobre la ejecución de los comedores sociales.
Redacción
La citación tenía como objetivo fiscalizar la ejecución presupuestaria del programa en el departamento de Sololá. Enríquez, presidente de la Comisión de Desarrollo Social, exigió explicaciones sobre la baja cobertura en algunos municipios y los criterios utilizados para la distribución de recursos.
La viceministra respondió inicialmente en español, pero luego cambió al idioma k’iche’, lo que generó una fuerte reacción del legislador.
“Contésteme en español… me parece una falta de educación de parte suya”, dijo Enríquez, señalando que no comprendía el idioma y que la funcionaria debía rendir cuentas en la lengua oficial de la citación.

“Me dirigí al pueblo de Sololá”
Zapeta se defendió argumentando que su intervención estaba dirigida “al pueblo de Sololá” y no específicamente al diputado.
“Yo hablo dos idiomas, el español me fue impuesto… Lamento mucho que en el seno del Congreso, donde debería manejarse la diversidad de idiomas, no se respeten”, afirmó, aunque finalmente accedió a traducir sus palabras.
Pese a su defensa basada en el derecho al idioma materno, no respondió concretamente a las preguntas planteadas:
¿Cuál es la ejecución presupuestaria real del programa de comedores en Sololá?
¿Por qué existen municipios con baja o nula cobertura?
¿Qué criterios técnicos se emplean para priorizar la apertura de nuevos centros?
¿Cómo se justifica el costo por ración, que supera los 23 quetzales en varias zonas?
Las respuestas fueron evasivas o inexistentes, y la comparecencia terminó sin esclarecer el uso de fondos públicos.
Reacciones divididas
La intervención de Zapeta fue respaldada por la Alcaldía Indígena de Rabinal, que denunció “violencia lingüística” y discriminación. Organizaciones como Winaq afirmaron que hablar en idiomas originarios “no es una falta de respeto, sino un derecho”.
Sin embargo, sectores académicos y analistas advirtieron que el uso del idioma en un contexto de fiscalización puede convertirse en un obstáculo para la rendición de cuentas, especialmente cuando se omite deliberadamente responder en el idioma en el que fue convocada la citación.
Comedores con alta ejecución… pero sin cobertura equitativa
Según datos del MIDES, en 2024 el programa de Comedores Sociales tuvo una ejecución presupuestaria de más del 94.7 %, con más de 6.1 millones de raciones servidas. Para 2025, se asignaron 181 millones de quetzales.
No obstante, existen departamentos como Sololá, Quiché y Alta Verapaz donde la cobertura es mínima en comparación con zonas urbanas como Mixco y Guatemala capital, donde se concentran la mayoría de centros activos.