Colegio denuncia ingreso abrupto de diputados y exige respeto a la niñez
El Colegio Rey Carlos II, adscrito a la Universidad de San Carlos de Guatemala, respondió mediante un comunicado oficial a los incidentes ocurridos esta mañana durante la visita de fiscalización realizada por los diputados independientes Brenda Mejía y Luis Ventura.
Redacción
Según el documento, los legisladores ingresaron de manera abrupta a las instalaciones del centro educativo, acompañados por personas no identificadas y con equipo de grabación, sin previo aviso ni coordinación con las autoridades del colegio.
La institución calificó la acción como una “conducta inapropiada para el entorno escolar”, y denunció el uso de un tono “elevado y enérgico” por parte de los funcionarios, así como expresiones que generaron tensión entre el personal y los niños presentes.
Los diputados fueron expulsados por manifestantes que se identificaron como padres de familia. En redes sociales circularon videos y mensajes ofensivos contra ambos, en especial contra la diputada Mejía, acusada por los presentes de “promover ideología de género” y hacer campaña para el partido Raíces. En varios de estos videos se registran empujones, gritos y consignas agresivas.
Por su parte, el colegio Rey Carlos II enfatizó su compromiso con la protección de la niñez y rechazó la presencia de cámaras y grabaciones dentro del recinto sin autorización previa, citando protocolos internos de seguridad y bienestar infantil.
“Es inadmisible que el espacio exclusivo para la educación y cuidado de los niños, incluso bebés de apenas 40 días de nacidos, sea utilizado con fines políticos o mediáticos”, enfatizó el comunicado.

El colegio concluyó su comunicado reiterando que su labor educativa no debe verse comprometida por agendas externas y que su prioridad seguirá siendo el bienestar emocional y físico de los menores.
La bancada suspendida Semilla, también se pronunció. En su comunicado, responsabilizó al rector Walter Mazariegos por las agresiones sufridas por los legisladores y por el periodista Hamilton Chang, de TGW, quien fue golpeado y despojado de su equipo por la Guardia Universitaria mientras cubría los hechos.
“El patrón de intimidación contra quienes fiscalizan el uso de recursos públicos en la universidad es evidente”, denunció la agrupación política.
TGW también condenó la agresión contra su reportero, señalando que “intentaron impedir que informara sobre los hechos de violencia”.