CANG: Planillas 10 y 4 asumen en medio de apelaciones y cuestionamientos
Diego Sagastume-Vidaurre, quien presentó una apelación contra de la elección del CANG, señaló diversas irregularidades en la resolución de la Sala Quinta de lo Contencioso Administrativo. Entre los principales señalamientos, destacó la falta de definitividad del amparo, la ausencia de competencia de la Sala para emitirlo y, sobre todo, la omisión de llamar a los terceros interesados, un paso esencial en este tipo de procesos.
Redacción
En una reunión a puerta cerrada, las planillas 10 y 4 tomaron posesión de la Junta Directiva y del Tribunal de Honor del Colegio de Abogados y Notarios de Guatemala (CANG) para el período 2025-2027. Esto se llevó a cabo la noche del 21 de marzo, luego de un amparo provisional otorgado a las autoridades electas. Sin embargo, la legalidad del proceso ha sido duramente cuestionada.
El acto de toma de posesión se realizó sin acceso a la prensa en el salón Mario René Chávez García de la sede del CANG. Patricia Gámez asumió como presidenta de la Junta Directiva y Alicia Franco como presidenta del Tribunal de Honor. Al concluir la reunión, los nuevos directivos salieron con sus togas puestas y confirmaron su designación.
Gámez reconoció que el proceso fue «atropellado», pero agradeció a quienes respaldaron su planilla. Además, afirmó que su compromiso será fortalecer el Estado de derecho y la democracia en Guatemala. Por su parte, Franco enfatizó la importancia de asumir los cargos en la fecha prevista y aseguró que trabajará en conjunto con la nueva Junta Directiva.
El conflicto se originó cuando la Junta Directiva saliente, liderada por Mario Siekavizza, emitió una resolución el 19 de marzo suspendiendo la toma de posesión de las autoridades electas. Justificaron la decisión argumentando que aún estaba pendiente una apelación ante la Asamblea de Presidentes de Colegios Profesionales. Esto generó alarma en el gremio, pues implicaba que la directiva saliente intentaría permanecer en el cargo pese a que su período vencía el 20 de marzo.
Ante esto, la Sala Quinta resolvió suspender cualquier acción que impidiera la transición y otorgó 48 horas para la entrega de los antecedentes del caso, además de dos días adicionales para informar sobre el cumplimiento del amparo. También advirtieron que cualquier obstáculo en el proceso podría acarrear responsabilidades legales.
A través de su cuenta de X, Sagastume-Vidaurre advirtió los vicios de la resolución de la Sala Quinta, advirtiendo que el amparo concedido no podía considerarse definitivo y que su ejecución sin agotar las instancias procesales vulnera el principio de seguridad jurídica.
Además, el abogado criticó que la Sala haya actuado fuera de su competencia al interferir en una elección gremial sin un fallo firme. Finalmente, resaltó que la omisión de convocar a los terceros interesados no solo contraviene el debido proceso, sino que deja en incertidumbre la validez de la decisión, lo que podría derivar en nuevas impugnaciones.
Con la apelación presentada por Sagastume y la falta de una resolución definitiva, la legitimidad de la nueva Junta Directiva y el Tribunal de Honor sigue en disputa. Las nuevas autoridades han anunciado que realizarán un acto protocolario público en los próximos días, mientras el gremio de abogados sigue atento a los próximos movimientos legales.
