Canciller Martínez habla de democracia ante la OEA pero omite las sombras de Elecciones 2023
El gobierno de Guatemala volvió a presentarse ante la comunidad internacional como defensor de la democracia, pero lo hizo con un discurso incompleto. El canciller Ramiro Martínez exaltó los resultados de las elecciones de 2023 y denunció supuestas amenazas al orden constitucional, sin mencionar los procesos judiciales que aún rodean al partido oficial ni las tensiones internas que cuestionan la independencia institucional del país.
Redacción
El ministro de Relaciones Exteriores, Carlos Ramiro Martínez Alvarado, representó a Guatemala en la sesión extraordinaria del Consejo Permanente de la OEA, convocada para analizar “las graves amenazas al ordenamiento constitucional y democrático en Guatemala”.
Durante su intervención, Martínez reiteró el discurso oficial del Ejecutivo, centrado en la defensa del orden democrático y los resultados de las elecciones de 2023, argumento que fue respaldado por la mayoría de los representantes de los Estados miembros.
Varios países repitieron la línea de condenar cualquier intento de desconocer los resultados electorales, sin hacer referencia a los conflictos institucionales o judiciales que persisten en el país.
Del total de 34 países miembros de la OEA, 19 representantes se pronunciaron en la sesión extraordinaria para expresar su apoyo al gobierno de Arévalo.
Solo el embajador de Argentina introdujo un matiz distinto al recordar la importancia de la independencia de poderes como pilar de toda democracia, aunque su mensaje también incluyó un llamado a respetar los resultados electorales, en sintonía con el resto de las delegaciones.
Los países que realizaron una declaración fueron:
- Antigua y Barbuda
- Argentina
- Belice
- Bolivia
- Brasil
- Canadá
- Chile
- Colombia
- Costa Rica
- Ecuador
- Estados Unidos
- Haití
- Honduras
- México
- Panamá
- Paraguay
- Perú
- República Dominicana
- Uruguay
El mensaje del canciller Martínez, alineado con la narrativa del presidente Bernardo Arévalo, se centró en proyectar una imagen de estabilidad y defensa democrática ante la comunidad internacional.
Sin embargo, omitió cualquier mención al caso penal que involucra al partido político que llevó a Arévalo al poder, proceso que continúa abierto en el sistema de justicia guatemalteco y que representa una de las principales tensiones institucionales del país.
Asimismo, el discurso del funcionario hizo alusión a los bloqueos de carreteras de 2023 como manifestaciones en defensa de la democracia, sin reconocer que aquellas acciones fueron orquestadas políticamente y vulneraron derechos fundamentales de miles de guatemaltecos, como la libre circulación y el acceso a servicios básicos.
Con este mensaje, el gobierno de Guatemala busca respaldo internacional en un momento de creciente escrutinio interno, pero el énfasis en la narrativa oficial y la omisión de los temas incómodos dejan abierta la discusión sobre qué tan completa es la versión que el gobierno presenta ante el sistema interamericano.



