Blanca Alfaro ¿la huida como recurso?
Blanca Alfaro ordenó cerrar las oficinas del Tribunal Supremo Electoral (TSE), inmediatamente después de conocer la orden judicial que obliga al TSE a declarar la nulidad absoluta en la inscripción del comité pro formación del partido Semilla.
Redacción
Obligada por la justicia a declarar nula la inscripción del partido al que responde, Blanca Alfaro eligió como salida cerrar el TSE «a partir del 24 de octubre del presente año».
La decisión es similar a la del avestruz cuando esconde la cabeza en tierra y la pone en aprietos, ya que el juez fue claro en cuanto a que «se certificará lo conducente» contra el responsable de incumplir dicha orden, que hace tambalear «todo lo actuado» en relación con Semilla, incluyendo las elecciones y el gobierno resultante.
La magistrada, en evidente desacato al juez, cerró a partir de hoy el TSE, en campaña de empadronamiento. Los resultados de dicha acción no son ponderables por el momento pero podrían implicar sanciones judiciales o incluso la fuga de Alfaro.









