Arévalo, navegando en el mar de las contradicciones
El diputado en funciones y ganador del balotaje, Bernardo Arévalo, tiene un discurso que se caracteriza por las contradicciones. La siguiente es una recopilación con comentarios de estas, que van de lo folclórico a temas legales que podrían afectarle y permiten avizorar una gestión presidencial veleidosa y sin bancada oficial, tal como anunció hace un momento el Tribunal Supremo Electoral (TSE), que oficializó la suspensión de Semilla.
Redacción
Los cambios constantes de discurso y las afirmaciones que niegan anteriores pronunciamientos son la característica más constante del diputado Bernardo Arévalo, quien casi en cada declaración contradice otra anterior, emitida por él mismo. Lo anterior, desde temas frívolos o simplemente ideológicos, como «ideología de género» y religiosidad, hasta asuntos realmente serios, que abarcan cuestiones legales y políticas.
Sumándose a este discurso contradictorio, imprecisiones y denuncias que pudieron provocar alarma fueron refrendadas por Arévalo, quien en agosto obtuvo medidas cautelares de la CIDH por un supuesto plan para asesinarlo, denominado «Plan Colosio», del que no se supo nada más.
Asimismo, Arévalo ha mencionado más de una vez que en el país existe un «Golpe de Estado», que denominó «en cámara lenta», lo que parece no solo inexacto sino un despropósito, ya que el gobierno actual parece muy estable y no hay ninguna denuncia oficial de este hecho, que únicamente ha servido para desinformar.
Contradicción: la palabra que define el discurso de Arévalo
Primera contradicción: «no sé qué es la ideología de género»
A principios de junio, una periodista preguntó a Arévalo sobre la «ideología de género». Su respuesta inmediata fue: «no sé. No la conozco». Esto, acompañado por un gesto despectivo.
Días después, Arévalo abogó por los derechos de «la comunidad LGBTQ+», y su partido divulgó un comunicado festejando el «Orgullo Gay». Además, fue enfático en la defensa de la diversidad sexual, lo que no tiene nada de «malo», pero es extraño para quien días antes, negó conocer la «ideología de género».
La guinda del pastel luego de que asegurara desconocer la «ideología de género», fue que hace unos días, en entrevista, usó la palabra «todes», inexistente en el idioma español según la Real Academia, pero que en el mundo hispano utilizan exclusivamente los promotores de la ideología de género.
Segunda contradicción: «no convoqué a manifestaciones»
El 2 de septiembre, La Hora tituló: «Tras convocatoria de Arévalo, guatemaltecos salen a manifestar contra Golpe de Estado»
A partir de ese día, cuando las protestas fueron mínimas, y especialmente un mes después, Guatemala se vio sumida en una ola de protestas, protagonizadas por las «autoridades ancestrales», que todo octubre sumieron al país en el caos y motivaron una serie de bloqueos ilegales que incluyeron chantajes, amenazas, extorsiones y violencia, generando incalculables pérdidas en el agro, turismo y comercio.
En el momento más álgido de los bloqueos, Arévalo incluso felicitó a los protagonistas a través de redes sociales, y fue patente la participación de varios diputados de Semilla electos y en funciones (entre ellos asesores de bancada), en todo ese movimiento. Sin embargo, poco después aseguró que él no convocó a esa «acción del pueblo defendiendo la democracia».
Tercera contradicción: las expropiaciones
En entrevista grabada en vídeo, aseguró que quitaría tierras a los que tienen más para darlas a los que no tienen. Poco después, desmintió su afirmación y reiteró lo contrario: no hará expropiaciones.
Cuarta contradicción: religión y política
Abiertamente agnóstico (lo que tampoco tiene nada de malo), Arévalo arremetió contra pastores evangélicos por decir que el matrimonio aceptado por Dios es entre hombre y mujer. Esto lo calificó como «discurso de odio». No pasó mucho tiempo sin que expresara que respeta la libertad de cultos.
Aunque aboga porque los religiosos no intervengan en política, la participación de sacerdotes mayas y algunos curas católicos en su movimiento de bloqueos ha sido muy constante. Entre otros, el obispo Álvaro Ramazzini tomó partido no solo por los bloqueos, sino por Semilla.
Quinta contradicción: denuncia por firmas falsas
En marzo de este año, Arévalo se presentó al Ministerio Público para pedir que se investigaran presuntas irregularidades en afiliaciones. El acusado fue el señor Jaime Gudiel, previamente contratado por Semilla para recolectarles firmas de afiliación, a Q7 por firma legitimada.
La denuncia desenmarañó una madeja de ilegalidades, con miles de firmas irregulares y evidente responsabilidad del partido Semilla. A partir de esto, Arévalo lanzó la consigna de pedir las renuncias de Consuelo Porras, Rafael Curruchiche, el juez Fredy Orellana que suspendió la personería de Semilla y otros funcionarios.
Sexta contradicción: vencimiento del período electoral
Una de tantas demandas de los bloqueos fue pedir la prolongación del proceso electoral. Los defensores de Semilla buscaban que este se extendiera hasta después de la toma de posesión, el 15 de enero, ya que ningún partido puede ser cancelado en período electoral.
Incluso Ramazzini acudió al Tribunal Supremo Electoral (TSE), para pedir la prórroga. Sorpresivamente, inmediatamente después del 31 de octubre, cuando concluyó el período, Arévalo y Semilla se congratularon por esto. Sin embargo, los grupos indígenas anunciaron nuevas protestas a partir de hoy.
Séptima contradicción: presupuesto nacional
En este tema, Semilla resaltó por su oposición cuando se discutieron todos los presupuestos nacionales, que calificaron como fuente de corrupción y desfinanciados.
Curiosamente, este año que se discutió (y dictaminó), el presupuesto más alto de la historia: Q. 124,800 millones, a Semilla le pareció muy poco y lanzó todas sus baterías para defender un proyecto que buscaba dotar al partido entrante con Q. 130,000 millones. Según Semilla, no podrán ejecutar todos sus planes si no reciben este monto.
Conclusión
Si todo sigue su curso normal, los diputados de Semilla asumirán sin bancada, lo que será una gran debilidad para el gobierno, ya que su grupo afín en el Congreso será independiente (además de la minoritaria representación de izquierda, que jamás ha tenido incidencia legislativa).
Al mismo tiempo, el Congreso podría demorar la aprobación del presupuesto y entonces, Arévalo debería iniciar su gestión con los Q. 115,443.7 millones del presupuesto actual.
Aunque la investigación del MP no se ha develado, cabe esperar que los próximos días se divulgue, y podría tener consecuencias para más de un legislador electo, que comenzaría su gestión con solicitud de retiro de antejucio. No se conoce el alcance que pueda tener dicha investigación, pero los resultados podrían desgastar al nuevo gobernante, quien ya se dio a conocer por sus contradictorias declaraciones.
