Ampliar período electoral sería el harakiri para el TSE
Los magistrados del Tribunal Supremo Electoral (TSE), debaten en el pleno si, a última hora, extenderán el período electoral, contraviniendo a la Corte de Constitucionalidad y a su propio accionar, ya que en septiembre promovieron la fecha como final del proceso. Sin embargo, escuálidos grupos de ciudadanos afines a Semilla, claman en las afueras del edificio para que el TSE transgreda la ley y prorrogue un plazo que ya había aceptado.
Redacción
El fin de semana, cinco ciudadanos que se identificaron como un frente cívico acudieron a la sede del TSE para dar declaraciones a informativos afines a Semilla, exigiendo la prórroga. Hoy, una agrupación de mujeres también manifestó en el lugar con la misma demanda.
Quienes exigen que el TSE extienda el plazo, olvidan que apenas en septiembre, el TSE publicaba en su página:
«Con base al Decreto de convocatoria y el calendario electoral definido, los integrantes de los Órganos Electorales Temporales y las autoridades del Tribunal Supremo Electoral (TSE), trabajan en la coordinación y desarrollo de las acciones administrativas y técnicas para la culminación del proceso electoral 2023, que está previsto para el 31 de octubre».
Los que demandan al ente electoral que incumpla sus compromisos y transgreda la orden de la CC, argumentan que defienden la democracia, si bien para que esta exista, debe haber un marco jurídico claro, que sería vulnerado si los magistrados cometen el tremendo error de pasar sobre sus propias disposiciones y la orden del tribunal constitucional, para complacer a grupos de choque que evidentemente, no tienen interés en que exista un marco jurídico definido.
En pocas horas, los guatemaltecos sabrán si finalmente el TSE «se disparó al pie», agregando otra cuenta al rosario de irregularidades que se le atribuyen, o si cumplió con la ley y decidió seguir con lo previsto, sin importar las consecuencias que esta acción pudiera tener para quienes puedan haber cometido delitos electorales.