Agricultores polacos bloquean el acceso a miles de camiones en la frontera con Ucrania
El ministro de Exteriores ucraniano denuncia una «inaceptable» destrucción de mercancía en la frontera común.
Por dpa/EP
Más de mil camiones se encuentran bloqueados en la frontera entre Ucrania y Polonia ante las protestas registradas en las inmediaciones por parte de agricultores polacos en respuesta a la decisión de la Comisión Europea de mantener las exenciones arancelarias a la importación de productos alimentarios procedentes de Ucrania.
El acceso en los pasos fronterizos de Yagodin y Rava-Rusk se encuentra cerrado y, según las autoridades ucranianas, el bloqueo tiene lugar en las dos direcciones. El portavoz del Servicio de Seguridad Estatal de Ucrania, Andri Demchenko, ha indicado que los manifestantes han impedido la circulación de los camiones y ha aclarado que durante el último día han logrado cruzar únicamente 145 vehículos de estas características.
Antes de que se establecieran los bloqueos, entre 1.200 y 1.400 camiones cruzaban la frontera diariamente en ambas direcciones. En relación con el paso de Shegini, que ha sido desbloqueado recientemente, Demchenko no descarta nuevos bloqueos en la zona de cara al futuro cercano.
No obstante, el tráfico de turismos y autobuses no se encuentra bloqueado y podrán atravesar la frontera, según ha explicado en declaraciones recogidas por la agencia ucraniana de noticias Ukrinform.
El ministro de Exteriores ucraniano, Dimitro Kuleba, ha tachado de «inaceptable» la destrucción de mercancía en la frontera y ha reclamado, «por el bien de las relaciones de amistad» entre los dos países, que los responsables de esta «provocación» rindan cuentas ante las autoridades.
«Cualquier agricultor debería cuánto trabajo duro implica producir cereal, especialmente en tiempos de guerra», ha aseverado en un mensaje publicado en la red social X.
Peticiones del gobierno
Este mismo lunes, el ministro de Agricultura polaco, Czeslaw Siekierski, ha pedido a los agricultores que retiren estos bloqueos a pesar de trasladar que «entiende» sus demandas. «Quieren que los consumidores sean conscientes de sus problemas y se den cuenta de que los problemas agrarios son problemas de todos», ha dicho en declaraciones difundidas a través de las redes sociales del Ministerio.
«Para satisfacer sus demandas necesitamos su apoyo. Abrir tanto el mercado de la UE para los productos agrícolas ucranianos fue un error. Nos ocuparemos de que no muchos de esos productos terminen en nuestro mercado», ha manifestado.
«Las protestas de los agricultores en la Unión Europea obligaron a un cambio de actitud de la Comisión Europea, que se ha dado cuenta de cuáles son las expectativas sociales», ha insistido antes de pedir a los manifestantes que recuerden que «no existe una solución rápida para todos los problemas».
Por su parte, el primer ministro polaco, Donald Tusk, ha aseverado que no existe «conflicto significativo de intereses entre el Gobierno y los agricultores», especialmente en lo referente a Ucrania. Así, ha afirmado que abordó el asunto con el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, durante su visita a Kiev.
«El hecho de que cientos de personas en Ucrania quieran ganar mucho dinero no es nuestro problema. Queremos ayudar a Ucrania como Estado, y Ucrania es una nación que se está enfrentando a Rusia. (…) Pero no puede ser que debido a la guerra y debido a la empatía hacia Ucrania alguien use la guerra como una forma de llevar a cabo una competencia desleal e inadecuada hacia nuestras empresas y trabajadores, hacia nuestros agricultores», ha puntualizado, según informaciones recogidas por la agencia polaca de noticias PAP.
El pasado mes de noviembre, los transportistas polacos protagonizaron también una serie de huelgas y bloqueos para protestar por la medida impuesta desde la Unión Europea que permite a los conductores ucranianos operar en territorio comunitario.
Los conductores solicitaban el restablecimiento del permiso especial a los competidores ucranianos para trabajar en la zona a pesar de que dicha medida fue suspendida precisamente de forma extraordinaria en señal de apoyo por la invasión rusa del país.